lunes, 27 de agosto de 2007

MIRKO, EL PAN DE CADA DÍA


En este empeño de buscar personas que vivan como verdaderos resucitados en el mundo de hoy, les presentamos a MIRKO, un salesiano de Eslovenia que con su alegría y silencio contemplativo, crea un ambiente muy grato a su alrededor.
Todos los días Mirko se sienta en las primeras bancas del santuario María Auxiliadora de Talca para agradecer al Señor el don de su vida y pide por todos los jóvenes para los cuales se consagró.
Regala muchos panes en los recreos, y con ellos, regala parte de sí.
Él nos invita a donarnos como un pan eucarístico que nace del trigo de los campos, se une al agua del bautismo y se hornea en el fuego abrasador del ESPÍRITU SANTO.
ERMITAÑO +

martes, 21 de agosto de 2007

La vasija rota...NUESTRAS FRAGILIDADES

Comparto con ustedes un cuento con el que me había encontrado hace mucho tiempo atrás, pero que hoy cobra un sentido muy especial, a la luz de las experiencias vividas en esta parte del camino.


Se trata de un cuento que "releva" y "dignifica" las propias fragilidades, sin las cuales no seríamos quiénes somos.


¡Cuánto bien hace el Señor también a partir de nuestras heridas...


Aquí está el cuento:
El jarrón Cuenta la leyenda india que un hombre transportaba agua todos los días a su aldea usando dos grandes vasijas, sujetas en las extremidades de un pedazo de madera que colocaba atravesado sobre sus espaldas.

Una de las vasijas era más vieja que la otra, y tenía pequeñas rajaduras; cada vez que el hombre recorría el camino hasta su casa, la mitad del agua se perdía. Durante dos años el hombre hizo el mismo trayecto. La vasija más joven estaba siempre muy orgullosa de su desempeño, y tenía la seguridad de que estaba a la altura de la misión para la cual había sido creada, mientras que la otra se moría de vergüenza por cumplir apenas la mitad de su tarea, aún sabiendo que aquellas rajaduras eran el fruto de mucho tiempo de trabajo. Estaba tan avergonzada que un día, mientras el hombre se preparaba para sacar agua del pozo, decidió hablar con él:

- Quiero pedirte disculpas ya que, debido a mi largo uso, solo consigues entregar la mitad de mi carga, y saciar la mitad de la sed que espera en tu casa. El hombre sonrió y le dijo: -Cuando regresemos, por favor observa cuidadosamente el camino. Así lo hizo. Y la vasija notó que, por el lado donde ella iba, crecían muchas flores y plantas. -¿Ves cómo la naturaleza es más bella en el lado que tú recorres? comentó el hombre. Siempre supe que tú tenías rajaduras, y resolví aprovechar este hecho. Sembré hortalizas, flores y legumbres, y tú las has regado siempre. Ya recogí muchas rosas para adornar mi casa, alimenté a mis hijos con lechuga, col y cebollas.

Si tú no fueras como eres, ¿cómo podría haberlo hecho?

sábado, 18 de agosto de 2007

El amor que devuelve a la vida

He estado pensando en los muchos "bloqueos" que hacen más difícil mi camino, y en las piedras bajo las cuales se ocultan mis temores y mis dolores. Pero, sobre todo, pienso en las muchas experiencias de vida y resurrección que el Señor me ha regalado a lo largo de la vida.


Han sido, todas y cada una, un llamado del Amor a salir "fuera" de esos encierros, para respirar el aire limpio de la vida nueva. Esa fue la experiencia de Lázaro. El amor de Jesús lo sacó de sus oscuridades y lo condujo nuevamente al resplandor de la vida y al gozo de la amistad.


Esta mañana leía un texto de Anselm Grun que me sugirió esta reflexión:

En la historia de Lázaro, es el amor de Jesús el que penetra en el corazón del difunto Lázaro y lo despierta a la nueva vida. En la resurrección de Jesús, es el amor del Padre, quien le envía el ángel que hace rodar la piedra. El amor del Padre penetra hasta la oscuridad de la muerte, hasta la rigidez cadavérica, hasta la descomposición. El amor del Padre despierta al hijo. También está dirigido a nosotros. El Padre también nos enviará su ángel, cuando nos encerremos en la tumba de nuestros miedos e impedimentos. Su amor quitará la piedra que nos ata al sepulcro y nos despertará a la nueva vida.
Esos "ángeles" tienen nombre y apellido en mi historia personal. Sus nombres los llevo escritos en el corazón, inmensamente agradecido por la luz que dejaron entrar en mi interior. Con ellos, que son "amigos, compañeros y hermanos" aprendí que la fuerza del amor es incontenible...aprendí que el amor sana, libera, levanta! LyA.

lunes, 13 de agosto de 2007

Amanecer a la vida nueva...desde el agua, como en el Estrecho


Acostumbrados a ver el sol despuntar cada mañana desde la cordillera de los Andes, resulta insólito y hermoso verlo aparecer desde el horizonte del mar, entre las olas del Estrecho de Magallanes. En Punta Arenas, el Sol nace desde el mar.
Esa imagen preciosa y novedosa que nos ofrece la naturaleza en este confín del mundo, me ha hecho pensar en la LUZ y el AGUA, signos pascuales por excelencia, y que representan y significan la vida nueva del cristiano.
Para irradiar con la luz del evangelio es preciso haberse sumergido en el agua, en las profundidades del mar. Es decir, para VIVIR la resurrección hay que levantarse desde las profundidades de la propia existencia: hondas, misteriosas, insondables…a veces también peligrosas.
Desde que el espíritu de Dios aleteaba sobre los mares en el origen del mundo, la imagen del agua ha estado siempre presente en la tradición y en la espiritualidad bíblica…y se quedó sacramentalmente en el bautismo.
El bautismo es el sacramento de la resurrección; y lo hacemos “memorial” cada vez que resucitamos, cada vez que nos levantamos, cada vez que nos purificamos.
En estos últimos días he vivido esa experiencia: la de la inmersión y de la resurrección. Me lo recuerda cada mañana el sol que se levanta desde el Estrecho de Magallanes. LyA.

miércoles, 1 de agosto de 2007


Este sábado 4 de agosto, una hermana carmelita descalza, del monasterio de Cristo Rey y María Mediadora (Santiago), nos alegrará a todos: celebrará 50 años de vida religiosa.
Ella es una mujer fuerte, alegre, y muy libre...LIBRE, ESTANDO EN UN CLAUSTRO.

No estaría demás encomendarla en nuestras oraciones, para que nos siga dando un TESTIMONIO de consagración y libertad interior.
Con alegría Pascual: ERMITAÑO +

El Maestro

El Maestro
Anselm Grun, Monje y sacerdote benedictino alemán, nacido en 1945. Es doctor en Psicología, Teología y Ciencias empresariales. También es consejero espiritual y director de cursos de oración y meditación. Vive en la abadía de Münsterschwarzach (Alemania), de la cual es prior.

Nos escribió Anselm Grun, desde Alemania

Lieber P. Patricio!

Herzlichen Dank für Ihre Mail. Ich kann zwar spanisch lesen, aber nicht schreiben. Daher antworte ich auf deutsch.
Es freut mich, dass Sie gerne meine Bücher gemeinsam lesen und so eine neue Orientierung gefunden haben. Und es freut mich,dass Sie für Ihre Gemeinschaft den Namen „Kämpfen und Lieben“ gefunden haben. Mit diesem Titel habe ich ja ein Buch über Männer geschrieben. Ich weiß nicht, ob es schon ins Spanische übersetzt worden ist.

Ihnen und Ihrer Gruppe wünsche ich Gottes Segen für Ihren Weg und den Engel der Hoffnung als guten Begleiter.

Herzlichen Gruß

P.Anselm

Abtei Münsterschwarzach
P. Anselm Grün
Schweinfurter Straße 40
97359 Münsterschwarzach Abtei
Tel.: 0049 (0) 9324/20 230
Fax: 0049 (0) 9324/20 231
E-Mail: Anselm.Gruen@Abtei-Muensterschwarzach.de
Internet: http://www.abtei-muensterschwarzach.de/

Hemos traducido su respuesta de este modo:
¡Estimado P. Patricio!
Agradezco cordialmente tu correo. Puedo leer a españoles, pero no escribir. Por lo tanto contesto al alemán. Me hace feliz que lean mis libros juntos, con alegría, y que hayan encontrado una nueva orientación para sus vidas. Y me hace feliz que hayan dado a su fraternidad el nombre "luchar y amar". Con este título escribí un libro referente a hombres. No sé si fue traducido ya al español. Le deseo la bendición de Dios a tu grupo y el ángel de la esperanza como buen compañero.

La resurrección de cada día, de Anselm Grun

La resurrección de cada día, de Anselm Grun
El camino de la resurrección —que transitamos de modo específico durante los cincuenta días del tiempo pascual— es un camino que nos lleva hacia una vida cada vez más "vital", más libre y más feliz. El camino de la resurrección es un camino de sanación. Comienza en la vida que pugna por nacer en nosotros, en nuestras posibilidades y talentos, en aquello que Dios desea rescatar en nosotros. Por eso, puede ser recorrido no sólo en el tiempo pascual, sino durante todo el año. Siempre que una amenaza se cierna sobre tu vida, cuando la depresión o la desesperanza te acosen, medita sobre la resurrección. Así te volverás a conectar con la vida que supera a la muerte, que levanta de la tumba y rompe el letargo interior. Anselm Grün se adentra en este misterio y desgrana la enorme riqueza simbólica del tiempo de Pascua y sus fascinantes textos evangélicos. Con 50 impulsos y propuestas concretas, ayudará a que tu quehacer cotidiano brille con la luz de la resurrección.

Un libro para hombres...

Un libro para hombres...
Extraordinaria reflexión de Anselm Grun sobre la identidad masculina. Presenta 18 arquetipos bíblicos, a partir de los cuales ofrece una certera y lúcida meditación sobre la forma de "ser hombres" en el mundo de hoy. Un libro "sólo para hombres". Vale la pena leerlo.