martes, 15 de abril de 2008

La fecundidad del dolor

Por estos días estoy acompañando a mi madre postrada en cama en el hospital. La aqueja una larga y compleja enfermedad. A sus 53 años la vida se le ha vuelto difícil y dolorosa.
Su estado de salud, sin embargo, ha sido una hermosa experiencia de fecundidad, porque ha despertado en nosotros una sensibilidad muy grande frente al dolor, y una cercanía y comunión espiritual con todos los que padecen "en su cuerpo y en su alma".
Son fecundas también las horas en silencio. Y las palabras de consuelo y esperanza. Una verdadera liturgia cotidiana desde donde "aparentemente" no se puede hacer nada.
Con muchos amigos y hermanos nos hemos unido en oración a causa de la enfermedad de mi madre. Veo entonces que su propia enfermedad nos ha unido más a Dios y nos ha introducido en la confianza de los hijos, que sólo saben estrecharse en los brazos de su Padre en la hora del dolor. El Señor suscita e inspira una esperanza inaudita y nos hace mirar más allá del horizonte...allá donde se puede ver una luz, si apenas resplendeciente...pero luz al fin y al cabo.
La enfermedad de mi mamá, ofrecida y rezada cada día, es fecunda, como la de todos los que se hallan en el límite de su propia existencia, y completan -como afirma san Pablo- los sufrimientos de Cristo en la Cruz. LyA.

3 comentarios:

Romina dijo...

Comprendo tu dolor, perdi a mi madre hace 4 anos. No hay mucho para decir, es complejo para el alma y para la razon. Pero es tan cierto esto de la comunion en torno al ser amado. El carino y la compania, las oraciones, los gestos...Haces muy bien en hacer palabras el dolor, las palabras hacen que todo fluya, que la vida continue aunque todo pareciera haberse detenido. Hablar, compartir, desahogar. Todas mis oraciones para tu madre, tu familia y para vos.

mj dijo...

La enfermedad siempre nos enseña...y de alguna forma también nos regala...quizás esa unión que has experimentado entre amigos y hermanos en la oración sea tu regalo...no lo sé...yo desde aquí, desde mi rincón también me uno a ti, y a todos en amor y oración...
Deseo que mejore tu madre...
Un abrazo grande
Jose

Manuel dijo...

Gracias por el comentario que dejaste hace unos días en mi blog, gracias por renovar DIDAJE blog. Estamos en comunión espiritual y sacerdotal, y mis oraciones te acompañan siempre.
P.Manuel.

El Maestro

El Maestro
Anselm Grun, Monje y sacerdote benedictino alemán, nacido en 1945. Es doctor en Psicología, Teología y Ciencias empresariales. También es consejero espiritual y director de cursos de oración y meditación. Vive en la abadía de Münsterschwarzach (Alemania), de la cual es prior.

Nos escribió Anselm Grun, desde Alemania

Lieber P. Patricio!

Herzlichen Dank für Ihre Mail. Ich kann zwar spanisch lesen, aber nicht schreiben. Daher antworte ich auf deutsch.
Es freut mich, dass Sie gerne meine Bücher gemeinsam lesen und so eine neue Orientierung gefunden haben. Und es freut mich,dass Sie für Ihre Gemeinschaft den Namen „Kämpfen und Lieben“ gefunden haben. Mit diesem Titel habe ich ja ein Buch über Männer geschrieben. Ich weiß nicht, ob es schon ins Spanische übersetzt worden ist.

Ihnen und Ihrer Gruppe wünsche ich Gottes Segen für Ihren Weg und den Engel der Hoffnung als guten Begleiter.

Herzlichen Gruß

P.Anselm

Abtei Münsterschwarzach
P. Anselm Grün
Schweinfurter Straße 40
97359 Münsterschwarzach Abtei
Tel.: 0049 (0) 9324/20 230
Fax: 0049 (0) 9324/20 231
E-Mail: Anselm.Gruen@Abtei-Muensterschwarzach.de
Internet: http://www.abtei-muensterschwarzach.de/

Hemos traducido su respuesta de este modo:
¡Estimado P. Patricio!
Agradezco cordialmente tu correo. Puedo leer a españoles, pero no escribir. Por lo tanto contesto al alemán. Me hace feliz que lean mis libros juntos, con alegría, y que hayan encontrado una nueva orientación para sus vidas. Y me hace feliz que hayan dado a su fraternidad el nombre "luchar y amar". Con este título escribí un libro referente a hombres. No sé si fue traducido ya al español. Le deseo la bendición de Dios a tu grupo y el ángel de la esperanza como buen compañero.

La resurrección de cada día, de Anselm Grun

La resurrección de cada día, de Anselm Grun
El camino de la resurrección —que transitamos de modo específico durante los cincuenta días del tiempo pascual— es un camino que nos lleva hacia una vida cada vez más "vital", más libre y más feliz. El camino de la resurrección es un camino de sanación. Comienza en la vida que pugna por nacer en nosotros, en nuestras posibilidades y talentos, en aquello que Dios desea rescatar en nosotros. Por eso, puede ser recorrido no sólo en el tiempo pascual, sino durante todo el año. Siempre que una amenaza se cierna sobre tu vida, cuando la depresión o la desesperanza te acosen, medita sobre la resurrección. Así te volverás a conectar con la vida que supera a la muerte, que levanta de la tumba y rompe el letargo interior. Anselm Grün se adentra en este misterio y desgrana la enorme riqueza simbólica del tiempo de Pascua y sus fascinantes textos evangélicos. Con 50 impulsos y propuestas concretas, ayudará a que tu quehacer cotidiano brille con la luz de la resurrección.

Un libro para hombres...

Un libro para hombres...
Extraordinaria reflexión de Anselm Grun sobre la identidad masculina. Presenta 18 arquetipos bíblicos, a partir de los cuales ofrece una certera y lúcida meditación sobre la forma de "ser hombres" en el mundo de hoy. Un libro "sólo para hombres". Vale la pena leerlo.